viernes, 25 de junio de 2010

Anathema, melancolía hecha música

En una época en que mis viejunos paradigmas musicales demuestran estar en pleno declive, Anathema se afianzan como un valor seguro. Esta banda de Liverpool comandada por los hermanos Cavannagh acaba de publicar un nuevo disco bajo el extravagante título de We're here because we're here, y nos regala a partes iguales sus habituales dosis de melancolía, emotividad, fuerza y complejidad.

No es Anathema un grupo de mainstream, pese a lo cual llevan haciéndose un hueco en el panorama musical del rock británico desde hace casi dos décadas. Desde que comenzaron a principios de los 90 como estandartes del Doom Metal hasta consolidarse dentro del sector más intimista y atmosférico del Rock contemporáneo, este grupo inglés ha ido rebajando el octanaje metálico de sus temas pero no ha perdido ni un ápice del carácter que siempre ha distinguido sus composiciones. Letras depresivas acompañadas de melodías tristes pero bellas, salpicaduras de rotundidad hardrockera, y un apego por la experimentación y las nuevas vías son su sello de identidad. Más vale que los habituados al soniquete comercial se abstengan porque una ración de Anathema podría provocarles serios daños cerebrales.

Tuve la suerte de verlos en Madrid durante la gira de presentación de su anterior disco, concierto que me dejó un estupendo sabor de boca. No me importaría repetir, pero de momento conformémonos con la grabación que hicieron en 2004 para Radio 3 con motivo de la presentación de
aquel trabajo, A natural disaster. Esto se llama Flying.

jueves, 24 de junio de 2010

Reflexión acerca del accidente de Casteldefells

Estoy conmocionado por la tragedia ocurrida en el apeadero de tren de Casteldefells, en la que un convoy ha arrollado a su paso a un grupo de jóvenes que cruzaban la vía indebidamente. Doce muertos y una cantidad similar de heridos, algunos de ellos en estado gravísimo. ¿Cómo puede pasar algo así? Cuentan que los jóvenes se acababan de bajar de otro tren cuando, al ver el paso subterráneo atestado de gente, optaron por lo fácil y comenzaron a cruzar las vías.

No conozco Casteldefells (ya quisiera) y aún menos su estación de tren, pero no me explico cómo tantas personas pueden ser víctimas de un suceso como este. A menos que la estación se encuentre ubicada entre dos curvas, a un convoy se le ve venir por muy deprisa que transite. Hoy más que nunca se hace necesario hablar de tragedia que pudo haberse evitado,
únicamente manteniendo la lucidez mínima para aplicar a la situación unas pequeñas dosis de paciencia y civismo. Y, por qué no, una percepción del riesgo un poquito mayor que la que, por lo general, tiene una juventud entregada en gran medida al hedonismo, a lo inmediato y a la no asunción de consecuencias.

Los jóvenes iban a participar en las celebraciones de la fiesta de San Juan; se celebraban a pocos metros del apeadero, según cuenta la noticia, y no pudieron esperar. Es un momento muy duro para culpar a nadie de algo tan terrible, y nada hay más lejos de mi ánimo que ser cruel o querer hurgar en una herida tan espantosa y reciente, pero concluir que su imprudencia les pasó factura
es un pensamiento que debe estar pasando por no pocas cabezas. En cambio, y remitiéndome de nuevo a la noticia, me encuentro con que en el lugar del suceso alguien culpa a la policía por no activar de un dispositivo que tuviera en cuenta el más que posible estado de embriaguez de la muchachada que llegaba a Casteldefells. Que estaban de fiesta, hombre. ¿Qué lectura podemos extraer de semejante reflexión?

Pues, entre otras, que entre la propia juventud parece haber individuos que
admiten tácitamente no poder hacerse responsables de sí mismos. O que delegan esa responsabilidad en la autoridad competente para así poder sentirse libres de ir un poco más allá, de llegar un poco más lejos cada vez. Libres de jugar incluso con su propio pellejo al amparo de esta tranquilizadora premisa: de producirse un desgraciado imprevisto la culpa resposará sobre los hombros de algún jefe de policía por no haber previsto hasta dónde puede llegar la estupidez humana. ¿Se puede ser más cínico?

Lo más raro, viendo lo que uno ve en su devenir cotidiano, es que no pasen más cosas. Los hay que tienen una percepción del riesgo muy tenue y
sólo tenemos que salir a la carretera para comprobarlo, no hace ni falta comprobar cifras. Hemos interiorizado que estas cosas les pasan a "los demás", pero no se nos ocurre pensar que nosotros somos "los demás" para el resto de la gente.

martes, 15 de junio de 2010

Memoria histórica atascada, inmadurez democrática española

Es un lugar común entre los afines al bagage moral del franquismo aludir a las fechorías perpetradas durante la II República, o cometidas por milicianos republicanos durante la guerra civil, en respuesta a toda mención de los crímenes franquistas. Pero su cortedad intelectual les despacha enseguida. Solo un par de apuntes: 1) el franquismo fue un régimen terrorista que ejercía la represión institucionalizada, mientras que los gobiernos de la II República, entre los que hubo uno de derechas, no lo fueron ni puede demostrarse que lo fueran; 2) no son comparables las atrocidades cometidas bajo el estrés de una guerra, y ahí están las llevadas a cabo por los aliados en Hiroshima, Nagasaki o Dresde durante la II Guerra Mundial, habiendo pocas dudas sobre cual era el bando correcto, con las consumadas una vez finalizada la contienda bélica, ejecutadas por el mismo aparato del Estado y contra una oposición política y social derrotada y sin apenas recursos.

Pedir lo que pide una campaña publicitaria a la que ponen rostro diversos nombres del ámbito artístico español es lo común entre personas decentes en naciones con sistemas democráticos sólidos. Pero ocurre que esto es España, y este país está plagado de indecentes que salen a la luz en cuanto surge una voz reclamando la reparación de los desmanes franquistas. Si la democracia es la expresión de la voluntad colectiva, determinados sectores de los que conforman esa voluntad no están porque la baja calidad de nuestra democracia mejore con respecto a otros países.

Hace poco volvía a leer sobre la disculpa emitida por el gobierno británico a finales de 2009 por la persecución institucional a que fue sometido el matemático británico Alan Turing después de la II Guerra Mundial, debido a su condición de homosexual, y que le terminó llevando al suicidio. Ahora, nuevamente es el Reino Unido quien hace examen de conciencia, en este caso con los sucesos acaecidos durante el conocido como domingo sangriento. ¿Podemos soñar con ver algo así en España?

Imposible. No mientras haya gente con poder e influencia interesada en difundir la idea de que eso es “remover el pasado” o de que así se fomenta el "guerracivilismo". O que todo es una maniobra de despiste, una "cortina de humo" para desviar la atención de los verdaderos problemas que aquejan a nuestro país (¿cómo es posible, me pregunto, seguir percibiendo esos problemas con operaciones propagandísticas tan hábilmente orquestadas?).

Es otro lugar común de quienes secundan esta doctrina, la cual continúa con el argumento del aborregamiento general, al cual atribuyen el calado de este tipo de campañas. En cambio, para mí aborregamiento es negarse por sistema a comprender una iniciativa justa dejando a un lado quien la promueve; aborregamiento por excesiva dependencia de determinados principios ideológicos lo podríamos llamar. Y por unos muy enraizados prejuicios.

Quienes ponen cara a la campaña supongo que lo hacen porque son populares y ello ayuda a divulgarla más eficazmente. Atacarles, como a buen seguro ya les están atacando, por unas filias políticas a las que tienen todo el derecho o por los resultados que cosechan en su profesión es el típico recurso fácil y gratuito. Es falaz y propio de gente sin capacidad de articular una argumentación que refute un mensaje, por lo que optan por atacar al mensajero. Existe en quien protagoniza esos ataques la necesidad de responder, de denigrar a los artistas y embestir en lo posible contra su imagen. No disponen de munición dialéctica de gran calibre para criticar la iniciativa en sí, pero les disgusta, porque la perciben como una agresión hacia algo que sienten como propio, lo que les lleva a contraatacar. ¿El delito? Se han pronunciado en el sentido equivocado y han tenido la desfachatez de cuestionar el estado de cosas que ellos han decidido que es intocable.

Es muy triste que la política de exterminio físico y social franquista siga contando con este tipo de defensores, ya sean tácitos o explícitos. A veces pienso que no se trata más que de simples tontos útiles que responden por impulso innato y no tras un estudio detenido y sosegado de las cosas.

Al franquismo se le puso en cuarentena durante la transición, pero ya va siendo hora de ajustar cuentas y de reconocer explícitamente el régimen del psicópata de Ferrol como la dictadura criminal que fue. Y si esto se alarga en el tiempo es debido a la renuencia de estos entes, políticos y sociales, a que tal hecho se produzca. Asesinatos, torturas, detenciones, secuestros, violaciones, represión… todo orquestado desde los aparatos del Estado y contra una población famélica, asustada e indefensa. No se está pidiendo ningún ajuste de cuentas contra nadie en particular, ni cárcel para ningún anciano falangista. Solo la reparación de la dignidad de miles de víctimas de crímenes de conciencia cuya culpa fue oponerse al mayor carnicero parido por España durante el siglo XX. Tan solo localizar sus restos esparcidos por las cunetas y que sus familiares puedan darles sepultura de forma digna. ¿Por qué es algo tan ofensivo para tantos? ¿Por qué lo consideran un agravio cuando ya hubo cuarenta largos años para que el bando golpista recuperara a sus muertos?

Quiero terminar mencionando a quien todavía habla en términos de vencedores y vencidos, a quienes aún hoy se jactan, que los hay, de quién ganó la guerra para utilizarlo como arma arrojadiza. El franquismo ganó la contienda militar, pero solo eso. Hoy día es España es un estado descentralizado, el ejército está supeditado al poder político, la Iglesia no impone sus criterios a la sociedad (pese a su persistencia), avances sociales antes impensables son hoy moneda corriente, el pluralismo político es ya algo irrenunciable… Observando cual es la realidad sociopolítica española actual, ¿de verdad hay alguna duda cual fue el esquema de valores que finalmente terminó venciendo? Es decir, todo aquello que el franquismo buscó aplastar mediante un golpe de estado y los subsiguientes cuarenta años de tiranía hoy es lo normal, el paradigma imperante. 

El paréntesis franquista, por tanto, supuso casi cuatro décadas de atraso, de frenazo, cuarenta años perdidos en los que España, pudiendo haberse puesto a la altura de los países de su entorno, quedó descolgada. ¿Y todavía hay quien se atreve a jactarse de quien ganó la guerra?

viernes, 11 de junio de 2010

Adiós a Peter Steele, líder de Type O Negative

Hoy me he enterado del fallecimiento en abril de Peter Steele, cantante, bajista y compositor de Type O Negative. Esta banda neoyorkina se hizo un nombre en los años 90 gracias al éxito de su disco Bloody kisses (1993), en el que combinaban un refinado metal gótico cargado de socarronería, ramalazos thrash y cierta evocación beatlelesca. Los subsiguientes discos no alcanzaron las cotas de popularidad de su predecesor pero si asentaron al grupo (especialmente October rust, 1996) como uno de los principales nombres de la escena metálica-oscura, y el principal proveniente de los USA.

De ascencencia europea y bautizado como Petrus T. Ratajczyk, Steele comenzó su carrera en los años 80 formando parte de bandas punk-metaleras como Fallout y Carnivore, tras lo cual se unió a Type O Negative publicando su primer álbum en 1991 y convirtiendo a la formación en un nombre clave del rock pesado de los 90. Su legado se ve recogido en la influencia ejercida en bandas muy populares como Within Temptation o Evanescence, así como en la extravagancia del personaje en cuestión. Baste añadir que fue acusado de simpatizante nacionalsocialista y que ha sido el primer hombre en posar desnudo para Playgirl luciendo una erección...

Steele ya bromeó sobre su propia muerte cuando hace unos años apareció en la web del grupo una especie de esquela anunciando su deceso, pero ello solo anunciaba un parón que se vio roto con la publicación de lo que ya, a todas luces, es el último disco de Type O Negative, Dead again (2007). No tengo noticias de que la banda vaya a continuar sin él, y pienso que sería un error buscar sustituto a un frontman de tan arrolladora personalidad y presencia (medía dos metros de estatura).

Es por esto que me ha costado aceptar su pérdida, aún tengo la esperanza de que todo sea un bromazo más aunque, este sí, llevado demasiado lejos. Tanto familia como miembros del grupo como Wikipedia lo han confirmado: el pasado 14 de abril Peter Steele murió de un ataque al corazón. Tenía 48 años y las malas lenguas dicen que su estilo de vida no era muy sano. Su caracter depresivo seguro que tampoco le supuso de gran ayuda. Echaremos de menos su peculiar modo de pronunciar las erres, su habilidad para poner los ojos en blanco y, sobre todo, los estupendos temas que componía para su banda.

Sirva como homenaje la que quizá sea mejor canción creada por Type O Negative, Christian Woman, en su versión extensa y subtitulado en español.

jueves, 10 de junio de 2010

Es mejor saber y conocer que ignorar

Un nuevo exhabrupto de Intereconomía ha vuelto a poder de actualidar el carácter faltón, cavernícola y mendaz esta cadena ultraconservadora. Todo por una iniciativa de la Consejería de Salud de la Generalitat catalana a partir de la cual se pretende fomentar una sexualidad sana entre los jóvenes. En mi devenir por internet he leído a alguien que se queja del pábulo que se le da a esta caterva de ultras, y sugiere que sería preferible un apagón informativo en todo lo que tuviera que ver con ella. No puedo estar mas en desacuerdo.

Desde luego, para algunos la ignorancia sigue siendo sinónimo de felicidad. Yo, desde luego, prefiero un país lleno de personas conocedoras de las cosas que de ignorantes de las mismas, ya que solo desde el conocimiento puede uno actuar con criterio. Pero, ay, saber tiene una pega, y es que no se puede alegar desconocimiento si, por ejemplo, un hatajo de trogloditas decide finalmente ceder a sus instintos protogolpistas. Saber también implica una responsabilidad: la de conducirse con arreglo a ese conocimiento, aunque supongo que para algunos esa responsabilidad es una losa demasiado pesada de cargar. Es más fácil y cómodo vivir en la ignorancia y dejar que otros solucionen la papeleta con la esperanza de que nunca haya papeleta que solucionar, pero con el secreto temor de que algún día la haya.

Si queremos una ciudadanía crítica no podemos ocultarle por sistema los aspectos feos y desagradables de la sociedad, o de su país, en un vano intento de salvaguardar su felicidad; estaremos abotargando su juicio, obstruyendo el libre contraste de ideas y que éstas crezcan y se desarrollen en un marco de libertad y tolerancia. Yo no quiero unos conciudadanos que voten al malo porque el rival evidencia ser todavía peor, sino que su actitud crítica ejerza la suficiente presión para obligarles a ambos a mejorar y no ser tan malos. Y para eso es necesario saber y conocer, desde la enseñanza primaria hasta el propio salón de casa a la hora de la cena mientras se ve la televisión.

Lo que el engominado energúmeno de Intereconomía sugiere es un marco moral para todo un país, el que a él le gustaría. Y que nadie dude que si lo pudiera imponer lo impondría, solo hay que ver como intoxica cuando tiene un altavoz mediático a mano en relación al folleto de marras: ¿alguien con dos dedos de frente puede pensar que realmente la campaña catalana incite al sexo oral o connmine a los adolescentes a practicar sexo indiscriminado?. Por supuesto, este prehomínido preferiría que los tradicionales tabúes sobre el sexo permanecieran vigentes. ¡Donde vamos a parar, enseñar a los adolescentes cómo ser más felices en salud en lugar de que sufrir una vida de represión sexual! ¿Para que vas a estar contento pudiendo estar permanentemente cabreado viendo Intereconomía? Y cómo los demás contertulios asienten con su silencio. Estas cosas hay que conocerlas, hay que saber para poder reaccionar a tiempo.

El espectador o el internauta que hace suyas esas animaladas no necesita verlas en la tele o citadas en un blog para reafirmarse en su modo de pensar. Todo lo más se envalentonará al ver que otros dicen públicamente y sin complejos lo mismo que él piensa en secreto. Y creo que eso es bueno, siempre es mejor la transparencia que la opacidad, en todos los ámbitos. Así, al menos uno sabe a qué atenerse y nadie puede sentirse después engañado.

martes, 8 de junio de 2010

Hay más sumisión incondicional ante Israel que antisemitismo

Al hilo de los últimos acontecimientos relativos a Israel observo de nuevo una sobreutilización del término "antisemita" para señalar a cualquiera que se atreva a cuestionar la posición israelí. De por sí el término es falaz y engañoso, porque tan semitas son judíos como árabes, pero el empleo indiscriminado del término esconde también lo que percibo como renuencia a exponer razonada y congruentemente los motivos de su uso. Se ha convertido en una palabra comodín que se presume suficiente para cerrar cualquier debate como ocurre con "facha", "progre" o "nazi". A alguien tildado de antisemita el sólo término ya debe descalificarlo, a él y a sus argumentos, no hace falta escucharle más ni prestarle mayor atención. Es un recurso fácil y cómodo para quien no quiere verse sometido al esfuerzo de tener que argumentar su postura.

Cualquier mente crítica y no sometida a una dictadura de consignas debería entender que
no comulgar con la política concreta de un país no le convierte a uno en presa del odio hacia todo lo relativo a ese país. Ocurre lo mismo con los USA, algo que se evidenció durante la etapa de George Bush. Quienes deploraban su política exterior (que fueron legión a lo ancho y largo del globo) eran sistemáticamente calificados de antiamericanos por los mismos sectores que ahoran abusan del termino antisemita. Lo que pasa es que una postura que no sea de total subordinación, ya sea hacia los USA o hacia Israel, hagan lo que hagan, es interesadamente interpretado por estos sectores como odio atávico, pasando de largo sobre esa servil y acrítica sumisión que se les observa. Por emplear su misma terminología, no es que los críticos supuren odio, es que los afectos rezuman apasionada devoción.

Y derivado de lo anterior es que, una vez posicionado en contra, ya sea total o parcialmente, de
lo que estas personas han determinado como el bando correcto, uno pasa a formar parte del bando rival de forma automática, sin mayor análisis. ¿Se acuerdan de lo que le espetó Aznar a Zapatero en el debate parlamentario enmarcado en el clima de pre-invasión de Irak? Le llamó "compañero de viaje de Sadam Hussein", o conmigo o contra mí, maniqueismo de manual. La gente así no es capaz de comprender, o ha levantado una barrera mental para impedirse entenderlo, que estar en contra de alguien por el motivo que sea no entraña simpatizar con los enemigos de ese alguien, que pueden ser tan abyectos o más que él. ¿Acaso son antisemitas los pacifistas israelíes que deploran las actuaciones de su ejército? ¿Quizá son topos de Hamás infiltrados en el estado israelí con el fin de destruirlo?

De tal forma, para muchas personas censurar las acciones de Israel les supone un alineamiento con Hamás y un asentimiento ante sus postulados
que en muchos casos (habrá otros que sí, supongo) ni pretenden ni avalan. Nuevamente, falacia de libro, por lo que no debería haber motivo para que uno tenga que explicarse ni defenderse. La parquedad intelectual de cada uno es su propio problema.

sábado, 5 de junio de 2010

Dos sanas raciones de pensamiento crítico

Antes de que el blog fenezca por inanición prestémosle atención a un par de vídeos. En el primero el ilusionista James Randi, un modelo de cordura, lucidez y sentido del humor, nos explica diversos modos en que las apariencias nos pueden engañar en forma de pseudociencias y la jeta que gasta quien de ello se aprovecha. El segundo es una curiosa animación basada en el concepto del unicornio en el garaje que Carl Sagan desarrolló en una de sus obras literarias, y que le enfrenta nada menos que con el vendeburras Iker Jiménez. Dos sanas raciones de pensamiento crítico vistas en Fogonazos y Magonia.


Cine de 2021 que ha pasado por estos ojos

A continuación dejo un listado de las películas de 2021 que han visto estos ojitos, junto con un enlace a la reseña que dejé en Filmaffinity...