miércoles, 28 de marzo de 2007

Zapatero se deja el talante en casa

En la noche ayer, martes 27, estuve viendo el programa de TVE Tengo una pregunta para Usted en el que el Presidente del Gobierno se sometía a las interpelaciones de una serie de ciudadanos de diverso origen y condición seleccionados ex-profeso para la ocasión. No lo vi desde el principio, aproximadamente me perdí la primera media hora, pero sí presencié lo suficiente como para poder hacer algunas valoraciones personales.

Cabe decir que me congratuló enormemente encontrarme con españoles (y no españoles) inquietos por cuestiones cotidianas, tangibles, de las que realmente afectan al devenir diario de los ciudadanos en unos tiempos en que determinado sector ideológico no ceja en su empeño de convertir al terrorismo en el permanente plato fuerte del menú informativo diario.

Me refiero a preguntas relacionadas con inmigración, empleo, microeconomía, educación, atención a la infancia, sanidad,... Ante éstas cuestiones y las intervenciones al hilo de Rodríguez Zapatero, la percepción que tuve es que el inquilino de la Moncloa se iba terriblemente por las ramas, resultando decepcionante en muchas de sus respuestas. Éstas, por lo que pude comprobar en no pocas ocasiones, tenían un tono cuasi institucional que contrarrestaba la cercanía y familiaridad que éste novedoso formato televisivo aparentaba favorecer. Era como estar ante un discurso parlamentario en el que se ha de actuar ceñido a un guión en lugar de frente a los problemas reales planteados por ciudadanos de a pie a los que, además, se tiene delante.

Empleó una retórica generalista, muy de campaña electoral, frente a preguntas directas y concretas, inquietudes explícitamente expuestas y problemáticas acuciantes; y mostró unas maneras distantes de muy escaso calado entre los ciudadanos, que ven con recelo el abismo que separa sus necesidades de las iniciativas que los políticos ponen en práctica. Zapatero recurrió a datos y echó mano de estadísticas que, sinceramente, me recordaron al modo de proceder de su antecesor en el cargo, un Aznar que siempre se refugiaba tras las grandes cifras económicas mientras se desentendía de las pequeñas economías domésticas.

Es cierto que evitó caer en el recurso fácil de coger el tren en marcha según se le iban planteando temas poco o nada abordados por su Gobierno, acertadamente en mi opinión. Determinados asuntos no pueden sino requerir un análisis riguroso y pormenorizado antes de emitir un pronunciamiento, y dejarse llevar por la pasión y el oportunismo momentáneo no deja de ser un recurso populista y demagógico. No obstante, algunas cuestiones sí precisaban de una respuesta más humana, más próxima, menos de manual, con la carga de autocrítica que hubiese sido necesaria. Pero ésto último, con una campaña electoral en ciernes, se antojaba harto improbable.

Zapatero estuvo más suelto y convincente en asuntos como "la cuestión" Navarra, la ilegalización de Batasuna o el caso De Juana Chaos, pero tampoco tuvo mucho mérito. La sucesión de estupideces, falacias e indecencias registradas a propósito de cualquiera de esos tres asuntos convertían en un juego de niños contestar lo que se le demandaba a modo de refutación.

El formato del programa, pionero en la TV nacional, pedía a gritos una actitud menos ensayada del Presidente, más natural, más accesible y adyacente al ciudadano. No estaba frente a sus compañeros de hemiciclo ni dando un mitin ante una audiencia rendida de antemano. Incluso el conductor del programa, Lorenzo Milá, acabó confesando con posterioridad su decepción por haber transmitido tal sensación.

En descargo de ZP habría que decir que sus habilidades oratorias se sitúan lejos de provocar envidias y que tampoco está especialmente dotado para la improvisación, aunque ello da más valor a su presencia en un programa que pone de manifiesto tales carencias. También es posible que, siendo conocedor (él o sus asesores) de sus limitaciones en ese campo se haya propuesto tajantemente no sobrepasarlas para evitar caer en situaciones más o menos sonrojantes. Demuestra disciplina, pero poca naturalidad.

En fin, creo que Zapatero perdió una gran oportunidad, ya sea por cálculo racional o por incapacidad innata, de desplegar un alarde de su tan traído y llevado talante, de acercarse a la ciudadanía de a pie y de revelarse humilde ante la crítica sincera y honesta. Pero también me quedo con otra sensación: si en España contáramos con una alternativa de gobierno medianamente decente y creíble en lugar del hatajo de cantamañanas que padecemos día tras día, éste hombre no duraba ni dos asaltos en la carrera por revalidar plaza al frente del poder ejecutivo.

6 comentarios:

  1. Me gustó el programa. El problema es el mismo del que adolece todo político: ya se sabía lo que iba a decir, no se mostró tan cercano a la gente que hubiera sido desear...
    Ya veremos a Rajoy, pero tampoco espero nada muy diferente (y no quiero decir que Zapatero y Rajoy sean lo mismo).
    Saludos.

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  2. Un análisis excelente Flashman, coincido contigo en todo lo que has expuesto.
    En cuanto a los titulares de la prensa y las conversaciones a pie de calle sobre lo acontecido, tengo que decir que, en términos generales, evidencian la lacra más acuciante de nuestros tiempos: la etupidez y la supina ignorancia de muchos. Que el dato más interesante que muchos saquen de esta entrevista sea lo de los 80 céntimos del café evidencia que en este país, o somos una tajada de descerebrados, o unos cachondos no confesos.

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  3. Totalmente de acuerdo con Flashman (novedad :-) y con xerach. A mí el programa me aburrió solemnemente hasta el punto que me cambié a House. No era mi intención ver un mítin, aunque, como bien dice Flashman, dadas las limitadas dotes oratorias de Zapatero, poco más cabía esperar.
    No obstante, le ha echado muchos huevos y, al fin y al cabo, ha sido la primera vez. De momento le ha abonado el camino a Rajoy, que ya estará ensayando para no caer en ciertos errores, aunque vista su creativa forma de hacer oposición, probablemente caerá en unos cuantos más. Resumiendo, que el programa con Rajoy promete ser mucho más jugoso, sobre todo cuando la gente no le pregunte sobre los temas que él domina (la ruptura de España, la rendición ante ETA, etc) sino ante los temas que hemos visto que preocupan a los ciudadanos y donde hacer oposición requiere cierto esfuerzo y no simple demagogia.

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  4. Pues a mí me parece que estuvo bien. Vale, no estuvo cercano, pero no creo que se le pueda reprochar: todos los políticos están bastante alejados de la realidad que vive el ciudadano de a pie. Es un formato nuevo y los políticos tienen que aprender a acercarse a nosotros y hablar nuestro lenguaje.

    Me gustó que aprovechase las preguntas para mostrar las políticas de tipo social que su gobierno está llevando a cabo.

    Y yo creo que si la oposición no se dedicase tanto a crispar Zapatero tendría mayoría absoluta en la siguiente legislatura.

    ¡Saludos!

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  5. Yo iría más allá. Creo que el programa puede ser otra oportunidad para Zapatero y su gobierno, pues les puede servir para conocer el sentir popular, y tomar buena nota sobre lo qué realmente preocupa al ciudadano de la calle, más en consonancia con su vivir diario, que con manipulaciones informativas, y opiniones fabricadas para hacerse con el poder.
    Sí el gobierno hace bien los deberes, debería tener en cuenta muchas de las cosas sobre lo que allí se le trato de explicar al presidente y que es lo que realmente la sociedad demanda.
    Una mejora real del nivel de vida del ciudadano (de la gran mayoria, y no de una pequeña minoria, como muchos creen), de su bienestar es la mejor politica para conseguir el ascenso al poder. Eso es lo que tendría que tener claro todo politico.
    Saludos
    CAS

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  6. Hola
    Me parecen muy interesantes todos tus analisis y comparto contigo que ZP estubo bastante distante, sobre todo la primera hora aprox...al final se fue soltando un poco del tono institucional y casi parecia coloquial.

    No obstante creo que en la calle ha calado la historia del cafe y mas o menos a la mayoria de la gente le ha caido en gracia.
    En mi opinion, para lo nuevo de la iniciativa, ZP ha salido ganando con la entrevista y si tienes dudas, consulta con alguien de la calle.

    En cualquier caso, me gustan tus analisis.
    Atentamente
    Un abrazo
    SyR
    NOta: en mi blog apoyo la iniciativa CHEQUE EN BLANCO
    http://saludyrepublica.spaces.live.com

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