martes, 28 de septiembre de 2010

Por qué es improbable que nos visiten extraterrestres

La existencia de vida inteligente ajena a nuestro planeta siempre ha sido objeto de controversia. Los avistamientos de OVNIs se vienen produciendo desde la segunda midad del siglo XX, siendo que la mayoría fueron identificados por sus avistadores como objetos voladores de origen extraterrestre. Ha habido mucho fraude en torno a esta cuestión, y cuando no ha sido así los investigadores serios han concluido que la procedencia de dichos objetos tenía poco de extraterrestre. Ello no ha sido obstáculo para que la ufología haya progresado y, aun dentro de un segmento social poco relevante, siga habiendo convencidos de que con frecuencia nos visitan humanoides verdes y de que los contactos con alienígenas son sistemáticamente ocultados por las autoridades.

No obstante, y
pese a lo atractiva que resulta la idea recibir la visita de entes procedentes de otros mundos, y centrándonos en argumentos más científicos, la probabilidad de que esto ocurra es bastante pequeña. ¿Por qué?

Hay que partir de una premisa esencial para analizar la idea del turismo alienígena por nuestro planeta, y es que
las leyes de la física con iguales tanto en el punto del Universo en que nos encontramos como en sus antípodas. Esto implica que la velocidad de la luz es la misma en cualquier punto del Cosmos, igual de infranqueable de acuerdo con la Relatividad general de Einstein ya que para superarla es necesaria más energía de la que nos queda tras acelerar un objeto hasta alcanzar esa velocidad. El otro aspecto importante a tener en cuenta son las condiciones en las que la vida arraigó en la Tierra. La vida inteligente tal y como la conocemos tiene un rasgo fundamental, y es que está basada en el carbono. Los grandes radiotelescopios actuales pueden rastrear enormes áreas del Universo para, entre otras cosas, detectar los componentes que forman las galaxias, las estrellas y los sistemas planetarios al través de la lectura de su espectro electromagnético. Con decir que pueden detectar la radiación de fondo de microondas, que no es otra cosa que el rastro electromagnético dejado por el nacimiento del universo tras el Big Bang, ocurrido hace unos 13.500 millones de años, dejamos claro el alcance que poseen.

Una vez sentada esta base, y sin necesidad de salirnos de la
Vía Láctea, el siguiente paso es averiguar donde se ubica una estrella alrededor de la cual se haya formado un sistema planetario que reuna las condiciones necesarias para el florecimiento de la vida basada en el carbono. No olvidemos que hablamos de entidades capaces de construir ingenios interestelares aptos para recorrer distancias inmensas. Añadamos de nuevo que, una vez estipulado que las leyes físicas se comportan igual en cualquier punto del Universo, y que la interacción entre los componentes de nuestra galaxia debería dar resultados similares tanto aquí como en el confín cósmico más extremo, no es descabellado inferir que la vida inteligente pueda abrirse paso bajo unas condiciones similares a las desarrolladas aquí en la Tierra, aun a muchos años luz de distancia.

El primer problema que se nos presenta es la distancia a recorrer para llegar hasta nuestro planeta. Los astrónomos sugieren que en la Vía Láctea podrían darse unos cuantos sistemas capaces de dar lugar a vida inteligente,
pero estos se encuentran a varios cientos de años luz. Recordemos que el año luz es una unidad de espacio, no de tiempo: es la distancia recorrida en un año viajando a la velocidad de la luz. Un viaje de esas características a velocidades cuasi lumínicas tendría un coste energético inasumible, por no mencionar el tiempo empleado en tan colosal travesía, que podrían ser milenios entre el viaje de ida y el de retorno.

Luego quedan los peligros intrínsecos de un viaje desorbitadamente largo por
un entorno marcadamente hostil como es el espacio. La letal radiación cósmica terminaría matando a quien se sometiera a exposición tan prolongada como la que estamos manejando. Se podría aducir que una civilización tan sumamente avanzada como para embarcarse en una empresa de tal magnitud habría desarrollado una defensa adecuada contra semejante amenaza, pero eso la entra más en terreno de la ciencia-ficción que de la ciencia a secas y supone una especulación alejada el terreno científico que aquí pretendo tratar.

Para terminar, cabría mencionar la
paradoja de Fermi, la cual fue formulada como respuesta a la amplia posibilidad estadística de que existan civilizaciones extraterrestres según en la célebre ecuación de Drake. El propio Enrico Fermi respondió que si no se hallan trazas de estas civilizaciones es porque su evolución tecnológica podría avanzar en paralelo a su capacidad autodestructiva, lo cual no dice nada bueno acerca de nuestra propia civilización, por cierto. Aunque quizá es que simplemente somos demasiado primitivos aún para poder detectar verdaderas señales de presencia extraterrestre en el Universo.

Todo lo anterior sumado a la ausencia de pruebas concluyentes de avistamientos alienígenas en nuestro planeta hace que el contacto directo, visual, entre nuestra civilización y otra de origen extraplanetario
se antoje altamente improbable. Las esperanzas de una comunicación de esta naturaleza se reducen hoy día a las señales de radio, las cuales también cuentan con la dificultad de tener que recorrer la inmensidad del espacio hasta llegar a mundos susceptibles de albergar vida capaz de interpretarlas, miles de años después de ser emitidas.


Fuentes consultadas: Carl Sagan,
La diversidad de la ciencia. Victor J. Stenger, God: the failed hypothesis. Stephen Hawking, Historia del tiempo. Wikipedia.

sábado, 25 de septiembre de 2010

Christopher Hitchens le saca los colores a la Iglesia católica

Christopher Hitchens, periodista y escritor inglés, es uno de los más vehementes y curtidos personajes públicos que se han posicionados frontalmente en contra de los dogmas religiosos y a favor de la razón, el pensamiento crítico y el método científico. Autor de Dios no es bueno, lectura que recomiendo fervientemente, y miembro de un selecto grupo de intelectuales comprometidos con una visión secular del mundo entre los que se encuentran Richard Dawkins, Steven Pinker, Daniel Dennett o James Randi, se despacha a gusto contra la Iglesia católica en la demoledora ponencia que les ofrezco a continuación, sacándole las vergüenzas a la curia romana con una argumentación despiadada a la par que devastadoramente veraz. Disfrútenla.



viernes, 24 de septiembre de 2010

La huelga general y la imposibilidad de hacerla

No acostumbro a utilizar esta bitácora para hablar de mí, pero tengo necesidad de sacar afuera lo que llevo dentro. Hoy en el trabajo nos han pasado un papel en el que debíamos consignar nuestra intención de acudir o no a nuestro puesto el próximo día 29, jornada de huelga general. Notaba que me desgarraba por dentro mientras escribía mi nombre y me identificaba como empleado, pasando a continuación a sentir una profunda decepción hacia mí mismo. No he tenido valor para hacer otra cosa. No paro de repetirme que si esta situación se da 20 años antes y sin cargas familiares a mis espaldas jamás hubiera consentido tal coacción; que ahora hay personas que dependen de mí y que no puedo poner su bienestar en juego por una cuestión de convicciones personales. Me parecen argumentos de notable utilidad práctica, pero que desde la óptica del amor propio y la dignidad personal me dejan profundamente insatisfecho.

He cedido, he permitido que pasen por encima de mí. Pregunté a un veterano de la empresa y me confirmó lo que ya había oído antes: según su criterio y a tenor de su experiencia, quien haga huelga el día 29 sufrirá represalias.
¿Cómo puedo estar seguro? Por un lado, tengo su testimonio con dos décadas de experiencia detrás; por otro, el papel que se chiva por anticipado de los empleados díscolos. ¿Puedo permitirme la duda? Los últimos que se atrevieron a ejercer su derecho a la huelga, me dice, terminaron en la calle. La situación laboral vigente entonces del sector al que pertenezco facilitaba la osadía. Había alternativas. Ahora, siendo mi sector el más golpeado por la crisis, solo quienes disfrutan de una posición más segura se la juegan. No, no me vale, no me sirve como justificación moral saber que he hecho lo único que podía hacer para salvaguardar mis intereses más cercanos. Porque mis intereses son también los del resto de la clase trabajadora, los del resto de asalariados que, como yo, ven cómo se produce un recorte en nuestros derechos como no se conocía desde hace décadas. Y que comprueban cómo la clase dirigente, hipócrita, corrupta y codiciosa en extremo se enriquece en forma directamente proporcional al empobrecimiento de la mayoría. Y yo me he visto agachando la cabeza ante todo ese cúmulo de felonías. Tragar saliva es lo único que se me ha ocurrido hacer.

Espero que la huelga del día 29 sea un éxito. Me solidarizo con quienes, al igual que yo, renuncian a su legítimo derecho a realizar la huelga por temor a perder lo poco que tienen.
Un sueldo menos en casa es hoy día una tragedia familiar y una carga adicional para el Estado, el cual se encuentra en un proceso de derribo del que pocos saben en qué situación saldrá, pero o mucho me equivoco o lo de ahora ha llegado para estar muchos años con nosotros. Solo encuentro una objeción a la huelga, y es que celebrada en tiempo de crisis garantiza que lo que yo he descrito en esta entrada se multiplique por tropecientos. Pedir este esfuerzo cuando mantener el empleo ya supone uno muy grande sería lo más cuestionable de la convocatoria, dejando a un lado polémicas sobre sus convocantes.

Conseguir que el trabajador se sienta como hoy yo me siento, hundido y desmoralizado, es una de las metas de ese empresariado sin escúpulos.
No dejen, si está en su mano, que les pase lo mismo. Hay que protestar en la medida que se pueda. Les dejo con un par de comentarios escritos en El Descodificador, el blog de Javier Pérez de Albéniz, lugar en el que unos cuantos comentaristas parecemos camino de formar una pequeña comunidad. Son del mismo autor, firma como RRR y deberían ser de obligada lectura para aquellos que aún piensan que la lucha obrera es cosa del pasado. AQUÍ y AQUÍ.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

La huelga general más necesaria

Yo haría huelga si pudiera. Me lo piden el cuerpo y la cabeza. Será la primera huelga general que viva en mi actual empresa, pero hay veteranos del lugar me cuentan que la doctrina oficial es “aquí no se hace huelga”, y quien la haga que se atenga a las consecuencias. Con ese panorama y con el mercado laboral en estado de derribo comprenderán ustedes que no es buen momento para jugarse las lentejas. Lamentablemente, esta última será la reflexión que empuje a muchos a sus puestos de trabajo el próximo día 29.

No obstante, pienso que la huelga es muy necesaria, aunque solo sea para dejar de dar esa imagen que como pueblo estamos dando ante la oligarquía dominante: dóciles, aborregados, sumisos, adormecidos y capaces de tragar con todo, con cualquier abuso que suframos nos afecte como nos afecte. Llevamos demasiado tiempo enviando ese mensaje como sociedad a nuestra corrupta clase dirigente y ya ha llegado la hora de decir basta. Hay que decir basta o lo podemos pagar caro a medio y corto plazo.

Y la protesta no solo debería estar acotada a las reformas impuestas por el Gobierno, encaminadas a hacer pagar el coste de la crisis a los menos culpables, que también, sino que
debería extenderse hacia el sistema propiamente dicho, ese que facilita el acceso de personajes siniestros a puestos de poder con el único fin de medrar y forrarse; o que permite el uso de nuestro dinero para rescate de los bancos, los cuales han sido parte desencadenante de la situación de crisis actual y que mantienen un descarado y obsceno influjo sobre el poder político; o que consiente que los mandatarios elegidos en las urnas presten más atención al dictado de mercados y especuladores que a sus propios compromisos electorales.

En definitiva, la huega del próximo día 29 podría ser empleada para protestar por el ROBO a mano armada al que nos están sometiendo. No quiero pensar que no lo notamos debido a la falta de uso, a que nuestra escasa cultura democrática no ha permitido el arraigo del hábito democrático. Porque lo que nos estan robando es la democracia, o lo que es lo mismo, el poder de decidir acerca de nuestro propio futuro. O al menos los últimos jirones de la débil y precaria democracia que aún nos permitían disfrutar.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Gracias a dios, soy ateo

El Papa de Roma, Benito 16, ha comparado al ateísmo con el nazismo. Según la prensa, para el níveo ensotanado el totalitarismo nazi es comparable al actual "ateísmo radical" en el que, según se desprende, vive hoy sumido el mundo. Lo ha dicho en un discurso durante su visita al Reino Unido.

Como es lo habitual, un acto de este tipo no es más que una sucesión de consignas sin posibilidad de réplica. De no ser así uno le hubiera preguntado en qué consiste, donde se da y qué perjuicios causa ese ateísmo extremo que tan nervioso le pone. Pero eso es algo que se cuida mucho de hacer, no vaya a ser que alguien le deje en ridículo con un par de simples frases. Total, a verle sólo pueden ir hordas de rendidos devotos que no parecen tener otro objetivo que responder con un "sí, bwana" a cualquier soflama que se le ocurra expeler.

Joseph Ratzinger es consciente del momento en que vive el club que preside. Azotado por los cada vez más difundidos -y ya era hora- casos de pederastia en el seno episcopal, y por un devenir mundial que cada día abre los ojos a más personas a la realidad de un mundo sin dios piadoso que valga, Benito 16 está agitando el fantasma de un ateísmo agresivo que no existe, para combatir un cada vez más floreciente pensamiento independiente, crítico e ilustrado. Sabedor de que es el tipo de arenga que miles de sus fieles están esperando escuchar para poner dar rienda suelta a su faceta más montaraz, el Papa alemán que fue nazi pone sobre aviso a quien desde ya quiera frenar la progresión de toda reflexión desligada de dogmas y verdades preconcebidas. Ese pensamiento es el mayor enemigo al que la Iglesia puede temer.

Con el descaro que quien se sabe arropado por millones de serviles y acríticos incondicionales, y con el apoyo cómplice de gobiernos enteros, Ratzinger se atreve a efectuar esa siniestra comparación. Un tipo que fue nazi, cabecilla máximo de una de las instituciones que más seres humanos ha masacrado en la historia de este planeta, institución que desconoce el significado de la palabra "democracia" y que hace de la discriminación sexual una de sus señas de identidad, líder de una secta plagada de sátrapas violadores de niños, ¿se presenta ante el mundo como referente moral? ¿Y señala a los ateos como el verdadero peligro? Definitivamente, algo está muy jodido en este mundo si este sujeto en lugar de recibir la atención que recibe no acaba perseguido por la justicia.

Ratzinger el bombero pirómano. Primero crea el problema, un conflicto donde no lo hay, con el fin de movilizar a las masas católicas para plantar cara al peligro ateo. Enciende la mecha, espera a que la bomba explote, cosa que está por ver, para luego presentarse salvador manguera en mano. Y es que ya ven lo peligrosos que somos los ateos. Solo buscamos vivir nuestra vida en paz sin que nadie nos marque el paso en materia moral, sin sufrir las directrices de gentes que ni nos conocen y a las que, en el fondo, les importamos un comino. Queremos que los teístas nos dejen vivir nuestro ateísmo libremente, pero esta simple declaración supone un peligro para ellos, lo interpretan como una amenaza. Religión institucionalizada y libertad son términos antagónicos. Y su gurú espiritual, el ex nazi de límpido blanco, nos quiere poner en el disparadero, convertirnos en carnaza para fanáticos. No creo que el Papa sea tan estúpido: sabe lo que dice, quien recibe el mensaje y como lo interpreta buena parte de esa audiencia.

Por todo ello, no puedo callarme. El Papa de Roma, Benito 16, el ex nazi Joseph Ratzinger (no creo que le importe la reiterada mención ya que él es el primero al que gusta mencionar a sus antiguos camaradas), es un miserable, un mendaz, un manipulador y un canalla de la peor especie, que solo busca el enfrentamiento con el fin de que su secta siga prevaleciendo para condicionar la moral de pueblos enteros a los que maldita la falta que les hace su perniciosa ayuda. No, machote, no vas a conseguir que nos callemos. Seguiré luciendo mi ateísmo con orgullo, en completa libertad y con total tranquilidad de conciencia. Porque...

GRACIAS A DIOS, SOY ATEO

...y también gracias a Ratzinger.

PD: en Murcia, una discoteca llamada "La Meca" ha decidido cambiar su nombre y su decoración debido a las amenazas de grupos radicales islámicos, que consideraban ofensivo el local. Una nueva muestra de la amenaza para la libertad de las personas que representa la religión, venga en el formato que venga. Tarde o temprano nos arrepentiremos de que este país no haya avanzado más en su laicidad.

¿Esto es lo que les molesta?


Pues que lo disfruten.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Fringe vs The X-Files, parecidos más que razonables

Hace poco han comenzado a emitir en algunos canales autonómicos una serie norteamericana de ciencia ficción llamada Fringe. La magia de internet permitió que ya tuviera vistas las dos primeras temporadas cuando esto empezó a ocurrir, con lo cual ya puedo hablar con un sobrado conocimiento de causa acerca de las semejanzas con su gran antecedente catódico de los años 90.

En los últimos tiempos me ha costado engancharme a productos televisivos, entregado casi por completo al cine, pero finalmente he caido, y tengo que decir que para bien. Sí, Fringe es largamente deudora de la clasica Expediente X (The X-Files) y directa heredera, tanto en su temática como en su tratamiento de personajes.

La División Fringe (algo así como límite o frontera) es una unidad especial del FBI dedicada a investigar todo aquello que se escapa a los métodos de investigación convencionales, y que suele tener algún origen desconocido que poco a poco se nos va desvelando. ¿Les suena a los viejos seguidores de Expediente X? Aunque pretende tener un sustento más científico que su predecesora, pronto uno abandona esa idea y se deja llevar por lo que no deja de ser ciencia ficción pura y dura. Eso sí, cuidada, fascinante y trufada por momentos de abundante jerga científica.

Al igual que la legendaria serie protagonizada por los también agentes federales Mulder y Scully, hay una trama central común a la mayoría de episodios que tiene que ver con conspiraciones a gran escala, detrás de las cuales parece haber oscuros poderes, pero cambiando los hombrecillos verdes por los universos paralelos. Es el punto fuerte de la serie y lo que crea la tensión y la expectativa necesaria para fidelizar al espectador.

También comparte con su serie referente una tensión sexual entre su protagonista, la agente Olivia Dunham, y su colaborador Peter Bishop que va cobrando cuerpo poco a poco pese a que inicialmente no desprendían demasiada química. El jefe de la división es Philip Broyles, el cual comparte carácter circunspecto con el subdirector Walter Skinner de los X-Files. Ambos, además, son capaces de jugársela ante superiores jerárquicos para proteger a sus agentes.

La novedad en Fringe es la inclusión de un personaje clave en el desarrollo de la línea argumental básica, el científico Walter Bishop, padre de Peter y que, tras ser rescatado después de dos décadas recluido en una institución mental, intenta recordar su pasado y su grado de implicación en los extraños sucesos que van aconteciendo. Aunque ni esto se puede desligar de Expediente X, ya que el agente Mulder también se pasaba episodio tras episodio intentando recordar qué le pasó a su hermana (fue supuestamente abducida) cuando él era pequeño. Hay otros personajes en la trama cuya importancia recuerda de una u otra forma a la que tenían los misteriosos confidentes que surtían de información a Mulder. Los ocasionales diálogos crípticos que mantienen con los protagonistas son otro punto en común a destacar.

Vistas las dos primeras temporadas, y aún reconociendo que hay capítulos de verdadero relleno, el eje central de la trama tiene suficiente interés como para mantener expectativas ante el inminente estreno de la tercera temporada. Ha habido episodios verdaderamente memorables y los fans de la sci-fi de calidad no andamos sobrados de ofertas en TV. Solo espero que el inevitable declive creativo que acaba sufriendo todo producto televisivo llegue a la División Fringe lo más tarde posible.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Sexo y cristianismo

Los vínculos entre la religión cristiana y el sexo paracen evidentes a la luz de su propia iconografía. Navegando por Google uno puede encontrar demostraciones de esta relación. Lo bueno es que todo son ejemplos reales y se pueden encontrar en distintas partes del mundo cristiano.

Inenarrable imagen, no me digan que no. Uno de los milagros de Jesucristo debió ser el de mantener esta portentosa erección aún después de crucificado. Lo que no pudo evitar es que le fallara la goma del taparrabos.


Sabíamos de casos de pederastia en el seno de la Iglesia, pero el bestialismo debe ser el secreto definitivo, todavía más recóndito e inconfesable.

Es bueno saber que existe preocupación por la higiene de feligreses y feligresas, hasta el punto de fabricar jabón con forma de monjita. Pero me temo que el creador del invento no ha tenido en cuenta el posible uso alternativo que se le pueda dar. ¿O sí?


Al parecer, la Iglesia no solo no termina de mostrarse firme con los casos de pederastia habidos en su seno, sino que los glorifica y los refleja en su propia iconografía artística. Uno en acción y otro esperando su turno... ¿¿qué pretende hacer con eso que lleva en la mano??


Esta imagen no tiene connotación sexual pero es igualmente llamativa. Un cristo con estética Ironman. Le podríamos llamar
Ironcrist. No quiero imaginar, dadas las imágenes precedentes, por donde expulsa los rayos repulsores.

Cine de 2021 que ha pasado por estos ojos

A continuación dejo un listado de las películas de 2021 que han visto estos ojitos, junto con un enlace a la reseña que dejé en Filmaffinity...